Cuál es el sistema de calefacción ideal para una casa de pueblo
La vida lleva a muchas personas a mudarse a grandes ciudades y espacios urbanos. Otras, en cambio, deciden quedarse a vivir en pequeños pueblos. Lo que siempre se debe tener en cuenta es que las características de estas viviendas son muy diferentes a las de los apartamentos, lo que hace necesario tomar medidas muy diferentes para calentarlas. Pero ¿qué tipos de calefacción para una casa de pueblo son más recomendables?
Qué sistema de calefacción es mejor para una casa de pueblo
La mayoría de viviendas construidas en los pueblos no tienen los sistemas de aislamiento térmico de los apartamentos modernos. Además, cuentan con paredes mucho más gruesas. Esto hace que conserven más el calor en invierno. Sin embargo, cuando el interior se enfría (por ejemplo, al abrir las ventanas para ventilar), cuesta mucho más calentarlas.
Siempre que sea posible, las chimeneas son los mejores dispositivos de calefacción para este tipo de hogares. Hay muchos negocios de venta de leña en Zaragoza, un combustible que resulta muy económico, limpio y sostenible. Además, el calor se puede canalizar hasta todas las estancias de la vivienda con una pequeña reforma.
Eso sí, ¿cómo calentar una casa de pueblo si no tiene chimenea o no se puede instalar una? Por suerte, hay alternativas:
- Pellets. Se trata de un combustible elaborado a partir de biomasa (fundamentalmente, serrín y residuos orgánicos) con un gran poder calorífico. Su precio tampoco es excesivamente alto y se presentan en un formato muy práctico. Hay que recordar que la instalación de estufas de pellets en Zaragoza, y alrededores, debe ser realizada siempre por profesionales.
- Suelo radiante. Es una buena opción para calentar una casa de pueblo si se van a acometer reformas. Se trata de un sistema bastante moderno, pero a la vez contrastado. No se puede olvidar que lleva un par de décadas utilizándose. Lo normal es utilizar agua caliente para calentar la superficie.
- Radiadores eléctricos. Hay otros tipos de estufas para casas de montaña más eficaces. Es cierto que resultan más baratos que los anteriores, pero también que gastan mucha electricidad para calentar este tipo de viviendas.
Cómo elegir el mejor sistema de calefacción para una casa de campo
Llegados a este punto, hay que hablar acerca de qué tener en cuenta a la hora de escoger el sistema de calefacción para una casa de pueblo:
- El tamaño de la casa. Dado que, cuanto más grande sea, más potencia calorífica precisará.
- Orientación. Debe tratar de aprovecharse al máximo la luz solar.
- ¿Qué instalaciones son viables? Sobre todo, si se trata de una casa muy antigua.
- Uso que se le va a dar. No es lo mismo que se quiera calentar solo un salón o una planta que el conjunto completo de la casa.
Teniendo en cuenta estos criterios, elegir el más adecuado entre los distintos tipos de calefacción para una casa de pueblo resultará mucho más fácil. Desde luego, siempre que se pueda es recomendable apostar por las chimeneas de leña o, en su defecto, las estufas que utilicen biocombustibles como el pellet. Son eficaces, seguros y respetuosos con el medioambiente. ¡Contacte con nosotros y compruébelo!